Aquí vuelvo después de un tiempo de desconexión, pero ya lista para visitar vuestros blogs y ponerme al día.
Hoy os traigo un producto natural que deberíamos tener todos en nuestro hogar, hablamos del aceite esencial de lavanda.
El aceite de lavanda es extraído mediante la destilación de las flores de lavanda, las antiguas civilizaciones ya usaban esta planta para sus funciones terapéuticas, para cosmética y por su agradable perfume.
¿Qué propiedades tiene el aceite de lavanda?
El aceite de lavanda se puede utilizar como potenciador, mezclando unas gotas junto al aceite que se quiera potenciar.
Es antiinflamatorio, se puede aplicar sobre quemaduras, soriasis, incluso en pieles irritadas tras la depilación.
Podemos utilizarlo para tratar problemas respiratorios, el aceite se encarga de relajar los músculos y a la vez regula el sistema pulmonar.
Tiene una acción regeneradora, viene fenomenal para pieles que han sufrido acné o envejecimiento.
Alivia los picores causados en la piel, como pueden ser los de la varicela o dermatitis.
Podemos aplicarlo para calmar a los bebes, añadiremos una gota de lavanda en la almohada en la que vaya a dormir, tiene efecto sedante y su aroma hará que descansen tranquilos.
El aceite esencial de lavanda se puede utilizar para realizar masajes relajantes, es uno de los aceites que más efecto antiextres produce y eso unido a un ambiente de velas y relajación... ¡Todo un lujo!
¿Habéis usado este aceite alguna vez?
¡Un besazo!
